martes, 9 de octubre de 2012

En Magdalena Alquizapan consiguen campesinos recursos para instalar su tienda

Juan N. Méndez, Pue.- Un comité de vecinos de la comunidad de Magdalena Alquizapan ha logrado conseguir la aprobación de un proyecto para abrir una tienda de abarrotes, misma que pondrán en marcha en días próximos cuando sean concluidos los trabajos de construcción de la misma, así lo señaló Florentina Rivera Palacios, presidenta de dicho comité.

Este grupo de emprendedores, con el apoyo del Movimiento Antorchista, tuvo la iniciativa de presentar ante la Secretaría de la Reforma Agraria (SRA) el proyecto que ahora les permitirá contar con una fuente de ingresos y de empleo: su propia tienda.

La señora Florentina Rivera declaró que fue en junio del presente año cuando comenzaron las trámites para lograr que la SRA les proporcionara los recursos necesarios para instalar su negocio, y que gracias al apoyo antorchista pudieron concretar su proyecto y acudir a la dependencia en cuestión de manera oportuna y constante, por lo que su gestión fue aprobada, apuntó.

La tienda estará ubicada en la Avenida Juárez número 16, en el terreno donde tiene su domicilio doña Florentina, para lo cual se tuvo que construir una parte y modificar otra ya edificada con el fin de disponer de mayor espacio para la exhibición de los productos.

Las cuatro mujeres y un hombre que integran el comité de la tienda, pertenecen a familias de escasos recursos que han invertido su tiempo y esfuerzo para conseguir que se convierta en una realidad, y esperan obtener con ello una fuente más de ingresos, que les ayude a solventar los gastos familiares que la actividad del campo y la venta de pulque no pueden cubrir.

Además, los involucrados tienen la intención de contribuir con el abasto de mercancías en su comunidad, donde las tiendas no abundad, y ofrecer a buen precio productos tan básicos como el maíz y el frijol.

“Primero vamos probar, y si funciona la tienda vamos a buscar una muchacha para que despache”, dice doña Florentina, refiriendo, muy acertadamente, que es necesario que haya alguien de tiempo completo que atienda el negocio, y que de esa manera los miembros del comité podrían ocuparse de sus labores campesinas y del hogar, al tiempo que brindarían trabajo a una dependiente.

Doña Florentina y su esposo son simpatizantes del Movimiento Antorchista desde hace varios años, y el apoyo recíproco entre la organización y los simpatizantes como ellos, ha sido de gran ayuda para pueblos como el de Magdalena Alquizapan, donde las al menos cien de sus ochocientos habitantes no saber leer ni escribir, lo que empeora la pobreza en la que viven